Senderos inexplicables sujetan el paso de las luciérnagas. A pesar de su falta de extremidades, siempre están ansiosas de oscuridad. En la amargura de su ausencia encuentro ridículos los movimientos circulares que describen la posición de su motricidad atrofiada y su innegable ímpetu por deshacerse del pecado de Leviatán.
El entendimiento encapsula la condena y refresca el desenfreno de la procreación injustificada. La relación de intimidad es solo la prueba del desenfreno lujurioso, insípido, graso y afligido de la realidad.
Necesidad?
Quien decidió que el abrazo del deseo acariciara mis mas profundos pensamientos?
Yo revelo su autentica falta de apetito, mientras me alejo me despido, mientras caigo alzo vuelo, mientras tanto…
…estoy dormido.
Ahora entiendes porque estoy muerto? Y entiendes que no solo la carne descompuesta evidencia su llegada. Fallecí el día en que nací, gracias a la prudencia de mi bienhechora.
Ahora solo encuentras el cuerpo.
Después hallaras su sangre.
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