mardi 29 décembre 2009

Gloire

Se llevó la mitad de tu cara y tus dos ojos.
Te dejó todo menos paralizado.
En nubes de hongo, han dejado nuestras ciudades en ruinas,
pero no me importa.

El éter sabe a náuseas.
Una distracción permanente desde el mundo exterior de la vigilia.

Cáe Lluvia!

"Glory? Glory? Hay algo mal?"

El igual que esqueletos en éxtasis, una fiesta de baile epiléptico.
Así que cállate y no vayas a gritar.
Tome mi mano señorita y vamos bailar! Al sonido de manos cercenadas aplaudiendo.
En nuestro entierro prematuro las bombas envuelven a los niños en las sillas de sus columpios.


El nuevo pincel nuclear del hombre, te volvió a dibujar en el lienzo de la Tierra; un cráneo en el lugar de un rostro.

En el sonido de la lluvia que cae, escucho los ecos de un imperio que llama tu nombre.
Un soneto fantasmal, una serenata con dientes de sierra y a través del humo los escucho cantar,
los escucho cantar,


"Glory."


VR

走ること

Disparó a matar, envolvió sus piernas alrededor de mi cara.
Y yo desnudo cuando ella no se contuvo y eso es todo.
Y donde esta el arte?
Está en las lágrimas de los niños retardados, cuando les dices que no existe dios.

Te vas a dormir para siempre, pero nunca cierras los ojos.
Porque cada día deseas poder tenerla una noche más.
Ella te hizo cantar el coro y mirar al tiempo pasar,
pero no me importa más.

La carne me responde, "divorcia mi cabeza de mi cuello"
para cenar en órganos calientes y eso es todo.
Y donde esta el amor?
Está en la hoja de este viejo cuchillo, la amada tomó su vida y luego despegó.

"Ponlas en el césped como vírgenes muertas, Diosa de la Alameda"


Roja Vendeta.

mercredi 16 décembre 2009

Take this anemic Picture.

Hypocrisy outrages the subconscious in such extraordinary pedestrian conventions. Refraining from empirical substitution, my four hearts convey apparent new reasons to resemble anthropoid responses from fainting models of humanity. The relief in the intellectual stability has wear off whilst the promise of perpetual comfort and ease are far from factual achievement.

Primata - My Turtlelish Heart
The older one keeps my memories away from me.
Secunda - My Serpentine Heart
The violent one fill my veins with acrimony for contemporary excess in worshiping mediocrity.
Tercia - My Vulturuous Heart
The vicious one prevents me from falling into the decadent sympathy of social appreciation.
Quadrata - My Larvae Heart
The youngest one suggests it is never ready to metamorphose.

...and the last heart was born out of the first snowflake.

Quinta - My Plutonic Heart
The smallest heart is already the only one still alive.

The first time you see the snow, you never want to blink again.
The first time you taste the snow, you forever want it to resemble blood.

*

mardi 13 octobre 2009

Subscribal Tendences

Casi cualquiera podría decir que mi capacidad intelectual esta debajo de una matriz lógica al aceptar el contrato que se establece al cliquear en este tipo de avisos. Muy por el contrario mi cerebro rebasa en muchos casos esta línea media de convención social sobre la inteligencia y en ocasiones roza la genialidad de admirables escritores y grandes filósofos. Sin embargo tengo un inconveniente neurológico tan solitario como el número 1 que le falta al 999,999,999,999,99,999,9999,999,99. El problema: estoy auto-condicionada a aceptar cualquier ofrecimiento formal o informal que me hacen. Esto me lleva a estar ahora escribiendo desde una clase de nado sincronizado y a dos horas de suicidarme.

NO ES UNA BROMA! GANASTE!
Felicitaciones eres el ganador número 999,999,999,999,99,999,9999,999,99.
RECLAMA AQUÍ!

Click.


Me llamo Josephine y tengo 28 años, me gusta la Crème brûlée, meter los dedos en los agujeros de los cigarrilos en la cojinería, el cabello corto, la música industrial, tocar mi Concertina en el parque Mountsouris, Degas, ver cine de Hollywood doblado al mandarín, el agujero en la moneda de 5¥, el primer cigarrillo de media cajetilla de Marlboro Lights, cambiar el motivo del calendario cada nuevo mes, usar como prefijo la frase SOME BAD ASS (por ejemplo SOME BAD ASS BABY SEAL para todo tipo de interpretaciones), las fantasías sexuales con Tin Tin, el sonido de los gatos caminando sobre el tejado, una que otra ópera, las gomitas de panadería y casi cualquier animal marino empezando con el narval.

Todo fue mas claro para mis padres cuando notaron el uso intermedio-avanzado de mi lengua madre (Francés) con solo un año y medio de edad. Para ese entonces mi padre Phillipe balanceaba la decepción de que yo fuera mujer con mi sobresaliente capacidad superior y la promesa de volverme una de las mentes más brillantes del momento. La trágica búsqueda de excusas que justifiquen un error (como yo) para hacerlo ver menos “erróneo” es casi tan patéticamente conmovedor como la esperanza en la futilidad de la causa misma (también yo), que repara en la simpleza del individuo y su búsqueda inalcanzable de significados para su triste existencia. También para esa época mi mamá Lucy empezó a percibir una anomalía particular en mi comportamiento cotidiano. No se me daba la actividad motriz muy adecuadamente, tan normal para los niños de mi edad. Las relaciones sociales fueron rápidamente reemplazadas con todos los libros de la biblioteca de papá y sus personajes de ensueño donde buscaba pedacitos de mi misma en cada gramo de arrastre en las manos de Edmond Dantès, la difícil elección entre Candide, ou l’optimisme, la melancólica sonrisa de Quasimodo, Imaginar a Gigi fuera de Audrey Hepburn, los versos desgarradoramente hermosos de L’Héautontimorouménos, la canción de la Cigale o la hipócrita pero asimismo conmovedora mirada de Tartuffe. Abordé de entrada la literatura universal y algunas novelas, seguí con libros de filosofía, teoría artística y para terminar cientos de revistas VOGUE y libros de cocina. Cuando una ha cubierto una cantidad razonable de toda clase de lecturas a los 6 años de edad, la vida acaba convirtiéndose en una flagrante excusa para recriminarse la supervivencia una y otra vez.

Entrar mas tarde a la escuela pública fue no menos risible que comentar mis problemas existencialistas a los niños de 7 años:

Josephine:Jean-Marc est-ce que vous dire que si l'existence précède l'essence alors Est-ce que la construction de l'objet est une fonction de leurs choix moraux?
Jean-Marc: Mamaaaaaaaaaaaaaaaaan! Je déteste Josephine!

y rápidamente mi casi nula interacción social, se reemplazo por un tutor particular que le procuró una certera destrucción a mi ya decadente autoestima para convertirme en un personaje de cuento de joven escritor frustrado, lo cual debo añadir, no era precisamente una conducta del todo práctica.

Con 11 años ya podía decirse que alcanzaba a mi mentor en todas las áreas básicas del conocimiento: Geografía, Historia, Biología, Matemáticas, Química, Física, Filosofía, Literatura, entre algunas otras. Me destacaba por haber aprendido 5 lenguas más que él y prácticamente dominaba a la perfección los instrumentos de cuerda, viento y percusión. Un par de años mas tarde fue cuando mis padres -de origen humilde- tocaron puertas en colegios especiales y algunas universidades. Finalmente comencé mis estudios de Medicina en la Faculté de Médecine Pierre et Marie Curie en Paris gracias a un favor que le debían a papá.

Al parecer la agudeza de mis habilidades superiores en cualquier área y la falta de una construcción emocional adecuada en un entorno colectivo me hacían invulnerable a la desdicha infinita de cargar mi pubertad a cuestas junto con la situación de convivencia entre adolescentes de mas de 20 años, quienes solo entendían como la fenomenal niña prodigio superaba de lejos sus capacidades y su conocimiento alcanzaba al de los mejores maestros, pero cuyos guantes de latex siempre fueron muy grandes. Allí solo estuve un par de años y lo único que considero apreciable de mis estudios fue haber conocido a mi primera y única amiga. Se llamaba Alexandrine Delahoussaye, y ha sido y será el único ser humano con algo de sentido común sobre el planeta. Su nombre que significa: Defensora de la Humanidad, irónicamente contradecía su personalidad y su carrera como neuróloga. Por ponerlo en términos menos elaborados: “Estaba completamente desquiciada.” Alexandrine era de lejos una de las chicas mas hermosas de la facultad. A pesar de su forma de vestir desgarbada con ropa vintage de hombre combinada con faldas o vestidos de diseñadores y botas que mas bien parecían de vagabundo, la delicadeza femenina que fulguraba era exquisita. Su largo cabello negro, su piel blanquísima y sus ojos, uno gris y otro aguamarina solo hablaban de agonía e ironía. Pero además su sonrisa fulminante y un extraño hálito de catártica naturalidad, la hacían incomparable con otras bellezas que se escondían en la frivolidad de su esnobismo y los superficiales estereotipos de la artificialidad parisina y del mundo. Alguna vez había participado en un concurso de modelaje al que fue con un disfraz de ‘Nutria Gigante” tipo Disney que cubría todo su cuerpo y aunque difícilmente quedo entre las finalistas, no se puede negar que fue muchísimo mas memorable que la ganadora de la competencia. La vida sentimental de Alex era tan herméticamente autosuficiente y envidiable que contadas veces la vi saliendo con alguien. Claramente no como necesidad emocional o sexual, sino como parte de su aleatoriedad habitual y sus experimentos sociales de manumisión. De cualquier forma sus insólitas conquistas le valen la pena una mención en esta carta: Un tipo dentro de la cárcel, el guapo argelino lisiado de la lavandería, un gemelo proxeneta, su hermano, un vagabundo, una poetisa de 78 años, un travesti, una mujer de una línea para adultos, un imitador de Ringo Starr, un embalsamador, un sacerdote, una artista vietnamita que usaba el aire para pintar sus cuadros (sin comentario), y un león marino.

No creo que el mundo haya conocido a una persona con una combinación mas extraña pero apropiaba en la fórmula de su personalidad. Detestaba a la humanidad mas que el misántropo más arraigado. Cuando salíamos a comer, pedía una ROYALE WITH CHEESE para llevar, me llevaba a Montparnasse y entrábamos a cualquier restaurante vulgarmente lujoso y me pedía comida de mar -muchas veces la mas costosa- y el mejor vino siempre. Cuando llegaba mi plato y era ya inevitable la transacción, ella sacaba sonriendo su hamburguesa y cenaba a mi lado con un placer sublime de comer poco saludablemente y ademas incomodar maravillosamente a algunas personas de otras mesas cuando sorbía su refresco. Confieso que yo nunca hubiera tenido el carácter necesario para permitirme perpetrar tan directamente una provocación a una escala indudablemente inofensiva pero eficaz a la hora de disfrutar la molestia exterior.
Alex creía devotamente en todas las religiones, sectas y cultos populares a las que de una u otra forma tenía acceso, por ejemplo las apariciones espontáneas de seres “maravillosos” en tostadas, paredes, pelajes de animales, alteraciones dérmicas y demás. También creía que el ídolo del cristianismo (Jesús) fue extraterrestre, abogado, Santa Clauss, Inversionista de Wall-Street, mecánico de transbordadores, gorila albino, Caddie de golf, gerente de Coca-Cola, sommelier, vampiro, Tony Hawk, bajista de una banda de Jazz en Noruega, Yo, un brontosauro, heces de paloma, la torre Eiffel, Alexandre Gustav Eiffel, Marie Gaudelet (esposa de Eiffel), una baguette, la Sífilis, los cepillos de dientes, Charles Darwin, Madame l’oie (Toxicomane dionysien), entre muchas otras cosas. OH! Y su Hámster Jesus! al que le rendía culto cuando era niña. Su estricta educación evangelista de obsesión por la imagen del “salvador” resultó tan contraproducente en su adiestramiento psicológico, que llevó a Alexandrine a convencerse consumadamente de la llegada de su mesías en la forma de un Hámster. Le construyó un altar, escribió oraciones y edito apartes de la biblia para alabar, según ella, la segunda venida de cristo. El castigo -sacrificar el Hámster y esperar 3 días- a la supuesta “aberración” producto de la propia manipulación cultural a la que estuvo sometida fue una de las razones de su odio perpetuo por los seres humanos.

Otros iconos de las diferentes religiones no fueron menos trascendentales para el crecimiento espiritual de Alexandrine. Siddhartha Gautama (Buda) primer y único humano importante, creó toda una filosofía de vida para adornar y justificar su colon irritable con su dieta vegetariana y su racionalismo irracional de alcanzar la iluminación procrastinando su vida entera y tener el cinismo de aparecer despiadadamente contento o dormido en sus representaciones respecto a sus compañeros de otros cultos. Mahoma era un pequeño que sufría de porfiria. Discriminado por los otros chicos (especialmente el capitán del equipo de camellos) y confinado a la soledad de su tienda decidió pasar su tiempo libre aprendiendo a leer y a escribir para narrar toda una serie de relatos fantásticos sobre como su velo facial mágico le daba el poder para patear traseros. Con Lao Tse teorizaba sobre su hermafroditismo adicional a la súper - adicción a una versión preeliminar del opio que lo llevaron a crear un universo de lecciones y reflexiones incomprensiblemente bien disfrazadas de sabiduría sumadas a la instauración de un ícono que representara su perpetuo estado de abstinencia v.s. abundancia, de PROTO-opio por supuesto. Los brazos de Ganesha nunca serán suficientes para invertir el efecto del capitalismo sobre la población de India, así como tampoco serán suficientes los cacahuetes que los indios le puedan ofrendar.

En resumidas cuentas la adivinación de una Bola 8 Mágica tenía la misma veracidad de un milagro o el nirvana. Ella entendía con claridad que en la vida: “NADA ES REAL” y como cada cultura nos impone la construcción de un mundo de códigos apropiadamente convenientes a partir de puntos de vista y reglas tan ridículas como reaccionar ante el color de una luz color verde o destruir nuestras vidas y trabajar incansablemente todos los días solo por conseguir papel impreso con la cara de políticos que antaño nos sometieron a nuestros fatales destinos bajo la opresión de canones aparentemente ineludibles al menos para la mayoría. Y aunque es imposible librarse de esta influencia como seres aparentemente racionales, no se puede negar que intentar repelerlo es igualmente válido que asimilarlo.

Su muerte tampoco dejó de estar adornada de la más bonita metáfora de autodestrucción y excesos. Era uno de los días más fríos del año, y nos vimos en un cafetín cerca del cementerio en la rue Duris. Alexandrine de vez en cuando acostumbraba recolectar excremento de paloma y distribuirlo aleatoriamente sobre los vehículos estacionados sobre la acera, ritual que le valió una contrademanda en la corte contra un oficial de tránsito que tuvo que indemnizarla por su deleitable ritual, ya que no infringía ninguna de sus leyes.

Dos de azúcar y una de sal como le gustaba. Cuando hablaba de nuestros planes no podía evitar pensar en lo mucho que la admiraba y en lo ridículo de las acciones que íbamos a perpetrar. Ositos de goma en las prendas de cualquier boutique, numerosos vomitos de broma a lo largo de la línea 1 del Métro, vender legumbres artificiales dans les Halles, o usar bigotes falsos en nuestras clases, entre tantas otras cosas. Aquel día el despropósito de la salida era expresar su admiración por Simone de Beauvoir. Así que se disfrazó perfectamente, incluso cuido los detalles de su ropa interior según me comentó. Recogió una estructura de papel plegado de unos 2 metros de longitud y nos dirigimos al Quai de Bercy a la altura del puente. Allí desplegó la estructura que resultó ser un barco de papel gigante; De un lado tenía alabanzas al presidente y del otro tenia insultos. Lo puso en marcha y se subió en el. Estratégicamente construído, el barquito no se hundió y prosiguió adentrándose en el Seine mientras Alex se regocijaba viendo la gente de un lado, molesta y contenta con las imágenes. Y viendo a la gente del otro lado, molesta y contenta con las imágenes. De pronto el barco comenzó a deformarse, luego a hundirse lentamente y de un solo golpe Alexandrine estaba bajo 100 kilos de peso con su cuerpo enredado en papel. Después de algunos minutos, uno de los trabajadores del puerto saltó en su auxilio y tras un angustioso rescate, Jean-Paul Janvović salvó a Simone Delahoussaye.

Curiosamente (y hermoso por demás), Alexandrine murió de neumonía el mismo día que De Beauvoir un par de días mas tarde, dejándome en su testamento ficticio la tarea de mantener con vida nuestros juegos y nocivas costumbres.
El día que ella murió hubiese sido adecuadamente muy doloroso para mi en un mundo común, pero al hacer eso Alexandrine me entregaba algo mejor: su propia forma de vida y la gracia de su necesidad de cometer el peor de los errores en la vida: No cometerlos.

Cuando se conoce la delgada línea que se traza entre los vacíos en las reglas, las posibilidades de exploración vivencial son casi infinitas. Una ya deja de preguntarse porque pasan las cosas o porque levantarse cada día, porque esta caja de cereal y no la otra, porque esta enfermedad y no la otra, porque este libro y no el otro. Una sola se lanza a la amalgama triste de decadencia y felicidad. Podía decirse que se nace con nuevos ojos para l'auto-destruction.

Con el titulo de “forajida de la humanidad” y la oportunidad de haber conocido a Alexandrine puedo pensar en la conclusión que llevó a término mi singular estilo de vida: No siempre se puede ser odio y tristeza, yo existía en ese campito pequeñito entre esta dicotomía y por eso vivía al margen de todos los códigos posibles. Auto-condicionarse con parámetros particulares en el comportamiento, establece al menos una intención evidente de emanciparse parcialmente de estándares populares mas generales, procurando en este sentido un beneficio intelectual casi integral y expansivo a veces, asegurando un umbral de tolerancia superior a la desgracia de la naturaleza en la razón, verificado a través del legado de situaciones, experiencias y referencias de autores previos a la experiencia. Parecía que mi prima máxima: d’accord, cumplía con los estrictos parámetros Kantianos de universalidad y me hacía navegar por nuevos mares de aventura aleatoria en cada instante decisivo pero a la vez irrelevante. Condicionando desde la simple elección de un dentífrico en la góndola del supermercado hasta la ruta de Le Métro que teóricamente me llevaba a mi destino circunstancial.

El tic-toc en el orden ecuménico de la causalidad entraba en crisis cuando se trataba de Josephine Badeau y su contradictoria manera de interactuar con el mundo exterior. Cualquier cosa podía ser posible en cualquier situación. El “savoir faire” finalmente parecía tener lo que estuvo perdido desde siempre, su "savoir". Casi por primera vez estaba pensando que me había desperdiciado al no haber hecho las cosas así desde el principio. Todo estaba cambiado como un trompo girando al revés o una muñeca rusa de la que cada vez se extrae una nueva figura de mayor tamaño. La aterradora realidad destruida inadecuadamente de la mano de la falta de esperanza en la pobre humanidad de carrera al abismo de la autodestrucción hacían mas placentero el deseo de "existir" por demás.
Cuando una toca su propio fondo, sabe entonces que casi cualquier posibilidad por ridícula que suene, contiene el secreto de la vitalidad justificada en sí misma. Es la llavecita que destapa la puerta del armario de vidrio y da viva al universo de otra realidad con la que siempre habíamos vivido pero nunca habíamos tocado. siempre tan ahí y tan solitaria, esperando desde siempre ser encontrada. Que patéticos somos los seres humanos y toda nuestra historia de gloria estúpida y falsa sensación de superación y pretensión de progreso. No entendemos jamás que nuestra perfección esta tan lejos del conocimiento y de respuestas. Nacer, Crecer, Reproducirse y Morir; estas cuatro palabras como paredes encierran nuestro implacable destino. Unidos como escoria tan suturados al fatal destino de nuestra carne, sin diseño aparente, el futuro es estrecho y de repente nulo. La dimensión en esta búsqueda por un significado es tan irrelevante como la respuesta misma.

NO HAY RESPUESTA, NO HAY PREGUNTA. Limitarse en la condición es solo prueba de nuestro fracaso. Los únicos límites son los que nosotros mismos hemos querido adoptar de la manera mas absurda, como construimos nuestras jaulitas de símbolos chiquititos que se fijan con pegamento de mentiras. Seguimos estereotipos, patrones, estándares, reglas, límites, restricciones, señales, avisos, programas y leyes de juguete.

Me llamo Josephine y tengo 28 años, soy heptasexual, vegetariana y consumo carne de res, me gustan los enanos en zancos, entrar al baño de hombres y orinar de pié, que mi ateísmo parece un culto a la nada, ir a Disneyland Paris el único día que cierra, comprar el boleto del bus y caminar a casa, ver hablar a los mimos, como corren los caballos de Gericault, las jirafas con tortícolis, la pluralidad singular de las muñecas matryoshkas, trabajar en la fábrica de extintores y haberme quemado en el auto por no tener uno, tener una moneda invaluable, mi alergia a mi comida favorita, enamorarme de los velorios, que Iceland has the green and Greenland has the ice, la diabetes de Willy Wonka, las miniaturas de dinosaurios, Michael Jordan jugando Baseball, usar anteojos sin lentes, los jugadores olímpicos de Cuba usando ropa deportiva Nike, o morirme en el LIVING ROOM el día de mi cumpleaños.

Rashgaünarook, el líder de la secta de algo como “LOS AUTOCREACIONISTAS POSTCRISTIANOS” nos invitó a escribir una nota para enviar en una cápsula espacial antes de abrazarnos juntos en el fuego maravilloso del kerosene del señor GALLYAKTTRÖN –amo y señor del universo, pero sin código postal- y así culminar 6 meses de preparación espiritual a los que atendí infaliblemente. A algunos minutos de llegar al lugar designado por la profecía para salvar los últimas semillas puras de la humanidad, solo me queda felicitarlo(a) por haber llegado tan lejos en tan desarticulada y agridulce confesión autobiográfica y desearle una desarticulada y agridulce vida.

Mi vida y todas las vidas solo se tratan de una cosa: NADA.

Lee 7 libros y medio, come órganos reproductores de moluscos, inicia una pelea de almohadas, toma clases de buceo, vomita en una caneca de Picadilly Circus, hazle un gesto obsceno a cualquiera, patea una lata por 14 calles, abraza a un extraño, quema tu reloj, guíate con un calendario de 1986, corta un árbol, invita a cenar a un vagabundo, vé a una fiesta de música disco en patines, cree en dios, no creas en dios, manda un mensaje en una botella, bautiza un pastelillo, usa pantalones con hurones, besa una persona ciega, camina sin zapatos, sonríe a escondidas, llora en las fotos de cumpleaños.

Enfin, je vais voler quelque mots:
This is your life, and it's ending one minute at a time.

Josephine Badeau ou Hürialiudkaa (Sect nom)

mardi 9 juin 2009

El fin es el comienzo es el fin.

Con la enfermedad presente a nuestro alrededor y sin poder hacer nada.
Cuando tengo tiempo de contemplar la destrucción de mis huracanes, sonrío al pensar que son tus alas las que me hablan desde el otro lado. Es tan diferente como la ridícula comedia se convierte de repente en amarga tragedia y como se caen nuestras máscaras venecianas mientras todos seguimos aplaudiendo a los actores de la tristeza aún sabiendo que somos nosotros mismos. Reducidos a esta única variable yuxtapuesta a la vida y prefiriendo primitivamente esos viejos delirios autodestructivos de nuestra nauseabunda irreflexión emocional antes que abrirle los ojos al silencio de la partida.
Esos viejos coros que tratan de revivirse unos a otros con el echo de la desgracia y nuestras falsas esperanzas. NO queda nada por revivir, ese anticuado fénix se esparció en la decepción de la realidad. Aquella magia del espejo siempre tan cautivadora y sutil en su encanto pero tan venenosa y afilada cuando corta. Se nos olvida que el único reflejo que necesitamos es el del agujero en el cuadro a la conformidad de la cremallera cerrándose en nuestra cara después de la caverna y las siluetas.


Saliva y pasa la página. Tinkerbell.



Misericordia y odio encuadrados en hilos de miseria. Un nuevo capítulo y otro par de páginas por leer y que nuevas nos revelará este último?
Nos dará mas datos sobre la ausencia de dios?
Nos seguirá llenando de perfidia e ilusión?
Nos sorprenderá con autenticidad y felicidad?
Nos deleitará con más fracasos y decadencia?
Talvez solo nos hable de abortos de dinosaurios en frascos, vikingos parapléjicos en sus barcos, las banshees afónicas en la tienda de conveniencia o la colección de grillos azules en el ático.

A veces solo pienso si queda alguna cura para esta enfermedad llamada “humanidad”

lundi 8 juin 2009

TheSimpleTruth

Una sentencia para reflejar la hipocresía de la grasa humana:
Te amo.

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samedi 4 avril 2009

Void

As I reinforce the sense of uncertainty, this practical solution for the hypothetical elucidation is becoming exaggerated and incomprehensible.
Mutual agreements surpass intellectual statements or empirical protocols. Thus, substantial existence is not only inadequate but also potentially destructive for the ulterior design. Repugnance once again enfolds pragmatic realities, and isolation comes at the least unsolicited occasion.

Condemned to wear this cloth of rotten flesh attached to my nauseating humanity is what perturbs me the most, although referential elation from specific interactions are allowed to inhabit remarkably amongst the fettle dead.
The familiar sentiments of self-destruction appear once again to stay for a lingering time. Well-known echoes of splintered voices keep howling mute phrases in my worn out skull celebrating the arrival of seclusion and misery. Now my old bewildered fiends start perpetrating those lucid manifestations with satirical acts of exuberant diabolical hoaxes.

I know my cavern is annulled yet again… Blank.
I know my cavern is nullified yet again... Naked.
I know my cavern is revoked yet again... Clear.
I know my cavern is unfilled yet again… Ineffective.
I know my cavern is unoccupied yet again… Useless.
I know my cavern is uninhabited yet again… Hollow.
I know my cavern is reserved yet again… I can’t avoid.

Wake me up when the lucid nightmares come.
Negra es la Vigilia.

samedi 21 mars 2009

Fragile Atonement

Concibiendo un escenario de prevención y retroceso que despierta la correspondencia intangible de inestables conexiones inter-emocionales y el cambio de arquetipo en la solución ficticiamente portentosa a las circunstancias mismas bajo procesos coyunturales de disposición alterada en el caso único de la presentación sorpresiva y la mutilación dirigente del ser humano.

Prejuicios irrelevantes elevan la relación protestada en la unificación sutil de las concepciones extraordinarias en cuanto formalizan mis monolitos de asimilación y contrariedad. Los sobresaltos eclipsados por el instinto atomizan la comunicación intangible de las formas cuyo efecto a posteriori es la duda en las aproximaciones a la condición inicial. NO es mi caso aclaro, tal que las circunstancias reclamen un grado mayor o menor de asimilación temporal; el hecho mismo de la dilatación ubicua en la proporción es lo que desencadena el apoyo y la ridiculización de mi propia esencia en Pro del esquema particular.

Los laberintos de una posibilidad intrínseca solo entorpecen el sentido brutal en destino del recurso. Solución que engendra las más descaradas hipótesis de reparación. Pacíficamente me veo obligado a expiar ese malestar condensado en aras de exteriorizar la subsecuente salvación, suponiendo que la seguridad producida en la incertidumbre va a sobrepasar el instante y me acercará un poco más a la estabilidad innata de la pureza espiritual.


Blanco es el invierno.

dimanche 1 mars 2009

Carta a Baleine

Un sentido homenaje a los homenajes,
A un mourning excerpt,
Y a Baleine.
A los refugios inesperados,
Al cemento de casa inglesa,
(que ha servido muy bien para las reparaciones).


Baleine, me sorprendió ver lo que hay en el tercer anaquel de mi biblioteca.
No había notado los cambios, jamás lo hago. Uno se olvida y se olvida, yo olvido más pero no quiero hacerlo esta vez. Perpetuamente disperso y tan ahogado en los globos del simulacro, jamás me dí cuenta lo que en mi oscuro refugio había estado escondiéndose entre el cajón de los espejismos y la lámpara prismática justo detrás de mi esqueleto humano.
La comida desaparecía repentinamente, sobre todo el contenido de la vieja caja de Trix y las zanahorias bebés que acompañaban tan misteriosamente a la abundante aparición de mi queso favorito. Tampoco puedo evitar contarte que la palabra alcachofa siempre me va ha hacer sonreír. Mi selecta colección de acetatos se incrementó sorpresivamente mientras veía como los arquetipos de mi destrucción fueron gradualmente esperanzados con sonidos de caracoles de mar y como interminables láminas de Historia Natural narran nuestra Historia Innatural.

Un día encontré una pequeña bolita de algo desagradablemente inquietante. Otro día estuve viendo como mi gata perseguía cinco pequeños seres naranja que rápidamente desaparecían entre las sombras. Y otro día vi colarse una cola blanca y húmeda detrás del viejo tocadiscos justo cuando comenzó mi canción favorita y no pude evitar cantar The dreams in which I’m dying are the best I’ve ever had. Sabes, ahora quisiera poder recordar todas esas veces donde el tocadiscos decidía tocarme una de esas que te hace sonreír, que te hacen feliz. En mi habitual abandonada inestabilidad no esperaba tan encantadores huéspedes y te equivocaste al pensar que el ritmo hace imposible vivir cuando en la belleza de mi disonancia buscaba campo dentro mi desértico destierro esperando el candor de la compañía inteligente en este laberíntico territorio. Me sigue gustando húmedo y frío, pero ahora hay un nuevo olor a océano irremediablemente placentero que no estaba antes. Los Juegos de pronto volvieron a parecerme entretenidos y el gris evacuaba paulatinamente mi refugio.

No olvidaré el primer día que te vi, que te encontré. Alimentando a tus conejitos creíste que podías aguardar en secreto con todos los puntos que dejaste para que conectara y llegara al término donde se revelara esa figura que parecía tan lejana al comienzo de nuestra fábula. Los conejitos movían amigablemente su nariz y tu no sabias que hacer mientras yo me quede mirándote y deseando que no te fueras, no esa vez. Cautelosamente me entregaste mi pocillo sin oreja donde tomabas té, yo te agradecí y te invite a otro pocillo de té porque sabía que no te gustaba mucho el vino y hablamos toda la noche de filosofía, arcosierras y electroírises. Me contaste que hacía tiempo estabas alojada allí y que milagrosamente yo había sabido evadir el inevadible encuentro.

Fue cuando comencé a ver claramente como mi cueva ya no era como antes y que me gustaban los cambios, me enamoré de los nuevos aires después de los buenos. Me enseñaste a bailar macabro, a sobrealimentarme de sándwiches, a cantar en la lluvia, a ver una película en 46,2 tandas, a esconderme del Abuelo Cachalote la vez que te visitó por sorpresa, a morder orejas, a no soltarte las manos, a coreografiar GIVE ME AN A, a verte en todos los patrones Tweed, a cocinar deslactosado sin lactosa, a preocuparme cada vez que tu fragilidad era más evidente, a cenar a las 11:59 PM, a pasar YA a desayunar, a comer gomitas hasta gomitar, a recordar fracciones de mis sueños, a preguntar PORQUE DIOS PORQUE?, a negarme interminablemente a montar a caballo, a sorprenderte con un patético y horrible cinturón amarillo y tantas cosas que sigo aprendiendo pero en ocasiones para ti no parecen tan notables como en verdad lo son.

Te escribo Baleine porque después de todo este tiempo no sé como agradecer todas tus maravillosas atenciones en la intimidad de mi nucleada morada. Prometo que voy a hacer mas cómodo el ambiente, con mas calor para tu frío eterno, menos queso por tu fobia, más dulces a tu colección perpetua, menos quejas del mundo, mas Indie y menos Goth.

También aprovecho para confesarte mi único miedo. Extinción.

Muchos balleneros saben que una ballena BLANCA es mas valiosa que cienmil genéricas. Por eso no dudan en enviarte arpones escondidos en taxis de la muerte para linda, o submarinos amarillos con torpedos asesinos. Hay una sola arma a la que no puedo tratar de vencer y si te marchas tan de repente como llegaste, seré yo el que buscará refugio en tu mansión marina y se esconderá meticulosamente en los Buenos Lutos y los ojos de tus peces gato. Tengo miedo Baleine, tengo mucho, pero mientras estés acá en mi humilde territorio con tus conejos y tus incontables maravillas solo puedo creer en lo que encontré escondido en el tercer anaquel de mi biblioteca:





Plain de bisous,
Lapin

lundi 9 février 2009

4 11 11 11

"Oportunidad es una mujer vestida de luna cubierta de sol."
Voz masculina y misteriosa, erótica, sensual ,sadomasoquista y a veces tierna y dulce y...
Taxexpress 2009



Y en la oscuridad de la noche veo una luz que me guía y me consuela.
Me ayuda a aferrarme al deseo de tus besos, cálidos como la lluvia de Abril, asfixiantes como un sueño de muchos sueños donde tus besos son rosas que guardo en mi triste corazón.
Estaré cayendo en la locura del cliché?
Me convertí en el caballero andante del melodrama?
Talvez, o talvez no.
Quizás, o quizá no.
solo se que contigo no se nada y que mis palabras se las lleva el viento, como hojas de otoño que caen suavemente en tus ojos y te coronan de dulzura y empalagamiento de palabras.

Estoy solo. No lo estoy. O talvez siempre lo he estado o talvez nunca lo he estado, o quizás todos estamos solos, o quizás nadie esta solo o todos somos uno solo en la soledad del aislamiento apartado del solo mismo y solo talvez cada frase que escribo solo es solo el reflejo de lo pobre y solo del mundo solo de las palabras solas.
me pregunto? y me respondo.
Caigo. Me levanto.
Inhalo. Exhalo.
Como. Voy al baño.
Uso Transmilenio. Llego a la estación de las aguas si me subo en un J72 y a veces va llenísimo y es un asco ir de pie y prefiero irme en bus así vaya por chapinero y se demore 40 veces mas porque al menos voy sentado, pero también es un asco los genitales de la gente a 10 cm del rostro de sí mismo (no cara, no faz no nada, solo rostros. Rostros que se ocultan tras mascaras de dolor y amargura y belleza y dulzura y una cosa y la otra y que fastidio y que placer y letras Y y paréntesis y un punto).

Porque? siempre me haré esa pregunta.

Las cadenas de la impotencia de no tenerte me hacen tan frágil y porque DIOS MIO! OH DIOS! DIOS OH DIOOOOS OHH! OHHHH NOOO DIOS OH MI DIOS! PORQUE DIOS OHHH NOOOO! PORQUE hablo de esta forma tan preguntona cada frase? porque a veces me respondo con otra pregunta igual de estúpida?
No lo se.
Nunca lo sabré y jamás lo sabre y a lo mejor no lo sabría nunca.

La culpable de mi ausencia de respuestas eres tu. Así como la culpable de cualquier cosa que escriba. Eres culpable de mi lunar gigante en la planta del pié, de que no pueda comer nueces, de que tenga fobia a los pepinos, de que mi poddle se llame MOTAS, de que mi mama haya conocido ami papa, del calentamiento global, de la reproductibilidad de los chinos, de la extinción de los dinosaurios....
... pero eres la culpable sobre todo de hacerme amarte tanto.

Porque? vuelvo a preguntarme,
Porque? y una vez mas,
Porque?

Parece que no hubiera leído un libro en mi vida y que solo conociera la forma de preguntar con el "porque" y PORQUE?

No lo se.

Parte de esto es crear una rima,
pero como si ya nadie se anima,
parezco un rapero mal hecho,
que hace poemas maltrechos.

No inexcusablemente es imperioso puntualizar los estados con vocablos o terminología sapientemente dirigente para aparentar una preponderancia de sabiduría en contaste con la forma execrable de prescindir de la simpleza de la locución tradicional, contándome llanamente a tu inventario de códigos anodinos e ignaros, o dicho de otra forma:

Te amo

OH DIOOOOOOOOOOOOOOS! PORQUE DIOS! DIME PORQUE?!
Será que ya se me acabaron la ideas y solo hago preguntas que no dicen nada ni responden nada?

Ya solo me queda repetir la dualidad, o no me queda repetir la dualidad.
Blanco. Negro.
Arriba. Abajo.
Frío. Caliente.
Delgado. Gordo.
Rápido. Despacio.
Comienzo. FIN.